ROSARIO FONTOVA
BARCELONA
Con un marcado tono racial, Juli Capella ha escogido 101 iconos genuinamente españoles, desde el tricornio hasta la aceituna rellena de anchoa, para elaborar su lista de objetos de uso común predilectos. Con la subjetividad como lema, el arquitecto barcelonés ha elaborado su particular ranking después de una larga experiencia plasmada en exposiciones como Diseños recortables, Cocos, 300% spanish design y una larga militancia ejercida desde la revista Ardi o desde el FAD (Foment de les Arts i el Disseny).
El libro Made in Spain. 101 iconos del diseño español, que publica Electa, es su nueva propuesta que, dice "toca un poco todos los sectores de la vida cotidiana" y reúne objetos, productos de consumo o marcas comerciales "fácilmente identificables". Con alguna concesión a su educación sentimental --véanse el Cacaolat, el futbolín, Mortadelo y Filemón o los Conguitos-- Capella recupera la hegemonía del toro de Osborne, que ya en el 2003 fue declarado por el FAD el mejor diseño español del siglo XX, el abanico, las castañuelas, el capirote, el botijo, y el traje de torero como símbolos cañís. Están el paquete de Ducados y la revista ¡Hola!; el billete de la lotería nacional y el bolso de Loewe; las pastillas de caldo Avecrem y la botella de La Casera.
INVENTORES
En el ámbito formal del diseño rinde tributo al gran Manuel Jalón, inventor del liberador mocho para fregar, a Gabriel Lluelles, padre del Minipimer, y al ingeniero Dante Giacosa, que diseñó el Seat 600. Está Antoni Gaudí, con su silla Calvet, pero también Jaime Hayón, cuya misión es modernizar la porcelana Lladró. Ecléctico, elige al imbatible Cobi olímpico pero también al más cateto Naranjito. Galante, descarta al Madelman para dejar paso a la muñeca Nancy.
De las últimas tendencias del consumo ha incluido la camiseta Custo y el osito de Tous; las tiendas Zara y El Corte Inglés. No olvida la paella pero incluye la tortilla desestructurada. Y es probablemente el buzón el objeto más usado y menos visible de su selección. Que por cierto añade una posdata poco simpática: el objeto 101 es un fusil Cetme, ejemplo de una realidad --en España hay 180 empresas de armamento-- que Capella no enmascara.
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Seat 600.
Silla Calvet de Gaudí.
Buenísimo este anuncio del Chupa Chups sin azucar
Por cierto el último logotipo de Chupa chups fue diseñado por Dalí.
Porrón. Típico de Catalunya, este artilugio de cocina para el vino se ha extendido por todo el territorio español.
A George Orwell no le convenció en absoluto el porrón. En Homenaje a Cataluña escribió: "Exigí un vaso (...)Para mi gusto se parecía a los orinales de cama".
FOTOGALERÍA: 'Made in Spain, 101 iconos del diseño español'
Según el arquitecto Óscar Tusquets, éste es el mejor diseño español de todos los tiempos. La aceituna rellena de anchoa comenzó a ser producido industrialmente por la marca Serpis en 1926. Para Capella, "Abrir cada aceituna, colocarle un trocito de pescado y volverle a poner la tapa tiene mucho de proyecto, hay diseño detrás".
En la imagen, la grapadora Casco, diseñada por Solozábal y Olave en 1934, y utilizada en las oficinas de medio mundo. Según Capella, "es de inspiración militar, cada grapa tiene que pasar desfilar por su carril con la precisión de una bala en el cañón".
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