Cuida tus pensamientos porque se volverán palabras, cuida tus palabras porque se transformarán en actos. Cuida tus actos porque se convertirán en costumbres. Cuida tus costumbres porque forjarán tu carácter. Cuida tu carácter porque creará tu destino. Y...tu destino será tu vida. Ghandi.

23 octubre 2007

President Maragall...



Seny i rauxa, con sus virtudes y sus defectos, en mi vida habrá un alcalde, un president, Pascual Maragall. Su último gesto no hace si no confirmar con un dato más, el respeto que siempre me ha merecido.
No dudo de su fuerza en la lucha contra esa enfermedad, una lucha que es personal, pero que también ha decidido hacer pública.

una verdadera gota malaya!
(Felipe González)

¡Cosas de Pascual
(Juan Carlos Rodriguez Ibarra)

Se'n va el president més original de la història de Catalunya
(Joan Barril)

Son cosas que se escribieron de él hace ya tiempo...

El catalanista que más ha querido a España.
(LLuis LLach).


Una lástima para Catalunya y para España que no se le haya entendido. Porque ese era el proyecto, esa era la solución. Una España funcionando en red.



No puc dirte més que una cosa...força, president, i una abraçada, estem amb tu!

EL NUEVO RETO DEL 'EXPRESIDENT'

Maragall anuncia que sufre alzhéimer y lanza un desafío a la enfermedad
• El expresidente buscará fondos para combatir la dolencia y fomentar la sensibilización social

• Lamenta la conducta de quienes han propagado rumores "interesados" sobre su estado de salud

La lección de Maragall
Artículo de Arturo San Agustin: 'Bienvenido al combate'
"Mucho ánimo, Pasqual"
Afecto solidario en Catalunya y silencio en el resto de España
Maragall quiere importar la red contra el alzhéimer de EEUU
"Una lección para Europa"
Los afectados aplauden la "valentía" del 'expresident'
El mal aumenta en Catalunya y afecta a 170.000 personas
Envíe su mensaje de solidaridad con Pasqual Maragall
FOTOGALERÍA: La trayectoria política de Maragall

15 octubre 2007

queeeee fuerte (segunda parte)

...y en solo 24 horas. Voces diversas.

ALFONS LÓPEZ TENA
Vocal del Consejo General del Poder Judicial.
Artículo de opinión en el día de hoy en el diario Público.


15 Oct 2007
Dependencia o independencia de Catalunya

Tras treinta años de democracia estable, sólidamente anclados en la Unión Europea y el euro, impensables los golpes de Estado, integrados en la globalización y prósperos, es hora de hacer balance sobre si le conviene a Catalunya seguir en España.

Salvo efusiones líricas, amenazas gonadales y acusaciones de delirio psiquiátrico (idénticas a las practicadas por la dictadura soviética), no se oye en España argumento alguno que justifique la dependencia de Catalunya. Los unionistas catalanes, salvo una cierta apelación a la resignación y la rutina, tampoco razonan, incluso recurren crecientemente al escarnio y la amenaza, aquí más próximos a los usos de la dictadura maoísta.

Es normal esta afasia, que se intenta ocultar bajo abundantes bramidos, pues el fundamento económico de la conveniencia de pertenecer a España ha desaparecido. Ya no es el Estado español quien tiene moneda y determina los tipos de cambio, los tipos de interés y los aranceles de importación y exportación. Ya no hay mercado español, lo ha absorbido el único europeo, y es Bruselas quien toma esas decisiones y se abre a la globalización, con el resultado inevitable de la disminución de la importancia relativa del antiguo mercado protegido: hoy Catalunya vende al resto del Estado menos del 40% de su producción, e importa de allí menos del 35%. A Catalunya la dependencia ya no le es compensada por el acceso privilegiado al mercado español, que además se ha convertido en arriesgado por ser el único en que los productos catalanes son boicoteados por el hecho de serlo (práctica del 21% de los madrileños, según ABC).

Sólo le queda a España un mecanismo de actuación económica, la inversión pública, y los datos y hechos son elocuentes: tras décadas de detraer cada año el 10% del PIB catalán sin invertir en Catalunya (19.200 millones de euros el 2005), se desploman los servicios públicos que gestiona España y llevan su E: RENFE, AENA, REE, ENDESA, etc. ¿Qué reciben los catalanes a cambio del expolio fiscal? Ni siquiera la transparencia, pues los balances fiscales, públicos en la Unión Europea, Alemania o Reino Unido, los ocultan en España tanto los gobiernos del PP como los del PSOE. ¿Qué esconden?

Tampoco a la hora de comprar empresas españolas es una ventaja estar en España, pues la toma de control catalana es bloqueada de una u otra manera, y contra ella se blande la Constitución y la xenofobia, que no se invoca frente a OPAs alemanas o italianas.

Al expolio del Estado y la explotación monopolística de los servicios públicos privatizados se añade la penuria de la Generalitat. Baste un dato: tras treinta años de autonomía, y para 7,5 millones de habitantes, el presupuesto catalán es de 32.000 millones de euros. Tras ocho años de autonomía, y para 5 millones de habitantes, el presupuesto escocés es de 46.000 millones de euros. Escocia en ocho años ha conseguido el doble por habitante de lo conseguido por Catalunya en treinta.

Mal negocio es hoy España para Catalunya: privada de política fiscal, crónicamente objeto de desinversión pública, discriminada hasta en tratados internacionales (esos que firma el Estado español prohibiendo que utilicen el aeropuerto de Barcelona los aviones desde o hacia Toronto, Miami, México, Bangkok, Kuala Lumpur, etc.), boicoteados sus productos, rechazados sus compradores como extranjeros hostiles, ¿a quién le interesa continuar la dependencia? ¿Alguien podría explicar alguna ventaja comparativa de la dependencia respecto a la independencia? (si puede ser, sin insultar).
El problema de Catalunya se llama España, que se dedica, mediante el aparato del Estado que los catalanes pagan, a bloquear todos sus proyectos: ni conexión ferroviaria del puerto con Europa, ni servicios públicos que funcionen, ni inversiones en infraestructuras, ni TGV a Europa, ni toma de control de empresas españolas, ni aeropuerto intercontinental, ni nada de nada.

Ya están conseguidos los objetivos modernizadores comunes a catalanes y españoles, España ya es democrática y europea, pero tan adversa a la diversidad como siempre, no se concibe como plurinacional sino como unitaria, y percibe a los ‘diferentes’ no como un activo a promover sino como una molestia a eliminar. Proclama que Catalunya es España, pero piensa y actúa que Catalunya es de España. Una posesión.

Intentamos de buena fe una corrección del expolio fiscal, el dominio político y la discriminación económica y cultural. Tendimos la mano para sólo recibir insultos, boicots y engaños, y un Estatuto que no se aplica ni cumple, pues este Gobierno español, como los anteriores, no tiene por qué cumplir la ley cuando afecta a Catalunya. No pasa nada, ya lo avalarán como siempre los Tribunales Supremo y Constitucional, que para eso los nombran el PP y el PSOE.
Se equivocan: bloqueada bajo España, maltratada en España, insultada por España, harta de España, a Catalunya sólo le queda un camino: la independencia.

España tiene mucho a ganar con un Estado catalán, perdería un miembro descontento y problemático pero ganaría un buen vecino y amigo, y podría superar los bloqueos que sufren las libertades y la democracia por causa de una estructura institucional concebida y practicada para asegurar el dominio de una mayoría nacional española sobre las minorías nacionales. Como ya advirtió Burke, es ese dominio la causa de las mayores corrupciones del orden constitucional.
Dijo Azaña que para mantener España unida había que bombardear Barcelona cada cincuenta años, método que calificaba de bárbaro pero efectivo. Los bombardeos ya no son posibles, y España no ha aprendido en su lugar el método de ganar la adhesión cordial e interesada de los catalanes. En el fondo, tanto da. Se ponga como se ponga, la independencia de Catalunya es ineluctable e inevitable. Mene Tequel Parsin. Ha empezado la cuenta atrás.


Salut!

14 octubre 2007

queeeeee fuerte!



Poster of Guest of Honour 2007 The Catalan Culture

© Frankfurt Book Fair/Hirth



Guest of Honour Catalan Culture poster, designed by students of the University of Applied Sciences, department design, Wiesbaden

© Frankfurt Book Fair




14/10/2007 PEQUEÑO OBSERVATORIO // JOSEP MARIA ESPINÀS

Si es italiano, entonces está bien
JOSEP MARIA Espinàs
Realmente, España tiene un problema inquietante: una buena parte de los súbditos tienen manía a otra parte. Los que tienen manía se presentan como fervientes apóstoles de la unidad. Pero es pedir demasiado, creo, que los agresores pidan a los agredidos que estén contentos de convivir con ellos.
Ya sé que hay españoles respetuosos con Catalunya. He conocido algunos. Pero los agresivos y los despectivos crecen y se multiplican. Confío en que mis lectores habituales tengan de mí una opinión de persona inclinada a la ponderación. Quizá si fuese un militante de la rabia no escribiría estas líneas, porque pensaría que el maltrato a los catalanes es natural y no tiene remedio. Pero a mí aún me sorprende la existencia de gente tan irritada. Y me pregunto inocentemente por qué.
Quim Monzó explica el caso de la chica barcelonesa que iba en taxi por Andalucía. Sonó el móvil: era su chico. "¿Com estàs? ¿Va tot bé?". Inmediatamente el taxista frenó y le dijo: "Oiga, ¿está hablando en catalán? ¡Baje inmediatamente de mi taxi!". Ella fue rápida: "No, no, hablamos italiano: mi novio lo es". El taxista se lo creyó y se disculpó --"pensaba que estabas hablando en catalán"-- sin darse cuenta de que la disculpa era una ofensa. Y arrancó de nuevo.
En una reunión en Madrid, a Baltasar Porcel lo abroncan porque Zapatero pacta con Carod. Él dice a los reunidos que no tiene nada que ver y estos se extrañan de que, siendo periférico, no comprenda que es culpable por naturaleza. Sigue la ofensiva: "En Catalunya los castellanohablantes son perseguidos hasta la extirpación". Les explica que aquí se puede vivir "tan pancho" sin ni entender el catalán, algo imposible si no se entiende y se habla castellano. "Mis madrileños se enfadan, farfullantes, y agitan varios periódicos, que deben de afirmar lo contrario".
Este es un punto clave para entender la patológica irritación anticatalana: el peso enorme de unos medios convertidos en martillo de herejes. Yo he andado por diversas tierras de España y he hablado con gente de todo tipo, a menudo muy buena gente, y he comprobado que las falsedades habían arraigado en muchos casos. Los periódicos y las radios de un belicoso nacionalismo español eran la Biblia. También en los círculos supuestamente cultos de Madrid, según cuenta Porcel.
He dicho al empezar que España tiene un problema. Que una parte del solar esté ocupado por catalanes. Molestan. La expulsión de los árabes y de los judíos no parecen precedentes a tener en cuenta.

http://www.elperiodico.com/

02 octubre 2007

de padres "barriles"...

...hijos "botijos"!



El rap del profesor!!



Charla de D. Emilio Calatayud, juez de menores de Granada.

Emilio Catatayud

de un post de Ver en Pax Celtibera.

Salut!

que pesaos son...

...más que un collar de melones!




1/10/2007 LA RUEDA // PILAR RAHOLA

El búlgaro que temía a Catalunya


La escena es anodina. Chófer hotel recoge huésped para llevar aeropuerto Madrid. Huésped pregunta por tiempo. Chófer pregunta procedencia. Y, conocidos los orígenes, él, búlgaro, yo, catalana, el diálogo se convierte en un tremendo huracán que descarga miedos y prejuicios sobre mi santo país, mi santa lengua y mi menos santa paciencia. Barcelona es bonita, pero los nacionalismos son malos. Quieren imponer el catalán. España se rompe por nuestra culpa. En el chaparrón, consigo abrir el paraguas y balbuceo algunas defensas, pero mi estimado búlgaro es un guerrero forjado en las mejores mañanas de la COPE, y está blindado ante la capacidad seductora del enemigo. No hay discusión: los catalanes son intolerantes, peligrosos secesionistas y fanáticos lingüistas, y lo único bueno es que Barcelona es bonita. Él vendría a trabajar, pero en Barcelona hay catalanes. Así que le aconsejo vivamente que se quede en Madrid, que en Catalunya todos somos polacos y no búlgaros, y eso se paga. Remata: los nacionalismos son una lacra para España. Cuando le digo que fueron nacionalistas catalanes y vascos los que se pusieron a la cabecera de la lucha por la democracia, me lanza una mirada retadora, por el retrovisor: además de catalana, mentirosa. Por supuesto, sus conocimientos de nuestra historia superan a los míos. La educación nos brinda, finalmente, un desolado saludo cuando llegamos al aeropuerto. Los dos estamos deprimidos y cabreados.
En el avión leo la entrevista con el president Montilla: "Catalunya no está ni deprimida, ni cabreada". Como yo, pero al revés. Será que no conocen a mi búlgaro. Sin embargo, el presidente tiene razón. Catalunya continúa a sus cosas, bastante ajena a la diana que le ha puesto la España negra, la misma que siempre la despreció, la misma que siempre la usó para atizar el miedo y azuzar el estómago. Pero la diana existe y está llegando al delirio. Piensen en mi estimado chófer. Nació en Bulgaria y no lleva mucho en España. Pero ya ha aprendido lo sustancial: que los catalanes tienen cuernos. Sin duda, la Brunete mediática es una gran escuela de integración.